Cuando el liderazgo se vuelve pesado, las conversaciones se rompen y los equipos se tensan, el problema no es la capacidad: es la forma en que se está conversando y decidiendo.
Acompaño a líderes y organizaciones a revisar cómo están operando, para recuperar claridad, coherencia y dirección, sin forzar personas ni sostener estructuras que ya no funcionan.
Trabajo desde la experiencia, la escucha profunda y la intervención precisa en el momento justo.